LOCALES
Militante de la Libertad Avanda acusa a Gerando González de acoso laboral y sexual: " se lo comuniqué a la diputada Maciel y me dijo, “pensá que puede ser diputado nacional”

Una mujer denunció días atrás por acoso sexual y laboral al candidato a diputado nacional por La Libertad Avanza, Gerardo González, tras un hecho vivido el 24 de agosto.
Leyla Naser, quien trabajó en la militancia de ese partido, contó que el empresario textil la fue a buscar a su casa supuestamente para una reunión partidaria, pero la llevó a 50 kilómetros de la ciudad, ocasión en la que la habría tocado y hecho insinuaciones de índole sexual.
Al respecto, contó que ella venía militando por el convencimiento con el proyecto de Javier Milei a nivel nacional, y hacia fines de agosto, un hombre llamado Elías la incluyó en un grupo de whatsapp en el que incluso estaba el candidato a senador Francisco Paoltroni, aparentemente para conformar grupos de militancia y fiscalización de cara a los comicios de octubre.
Al estar el referente local y candidato a senador en el grupo, Naser no dudó cuando la convocaron a una supuesta reunión de trabajo que se llevaría a cabo en la empresa textil de Gerardo González, en el barrio Fleming.
El propio empresario le habría dicho que la pasaba a buscar. Eran pasadas las 19 de ese día, según contó. “Una vez en el auto, me pidió que primero lo acompañe a buscar algo y después iríamos a la reunión, pero fuimos cada vez más lejos y me llevó a 50 kilómetros de la ciudad”, relató la mujer, y de manera similar lo contó en una transmisión en vivo en Instagram, con la que hizo trascender esta denuncia.
“Cuando pasamos la Cruz, me di cuenta que estábamos yendo a lugares que no eran los que me había dicho; que no íbamos a la reunión o que ésta no existía”, dijo.
De lo ocurrido en el automóvil no dio muchos detalles, por considerarlos “muy privados”, pero sí los expuso a la Policía y la Fiscalía N° 4. De todas maneras, afirmó que “el acoso laboral se da cuando me dice que vamos a ir a una reunión y me lleva a otra parte; arranca yendo sin mi consentimiento a los terrenos.
No tuve una actitud agresiva, sino que dejé que siga el curso de la cuestión”. Agregó: “Cuando pasamos el control de la Policía, se dio el tipo de situación que ya viví más personal. Lo que fue manoseo o lo que se generó cuando llegamos al lugar es lo que cuento con detalles en la denuncia”.
Tras esto, Naser contó que “de alguna manera” logró que González se dé cuenta de su incomodidad y la lleve de nuevo a su casa. “Me dijo ‘bueno, estás sana y salva’, entre otros comentarios obscenos que me hizo dentro de lo que fue la situación de acoso, y que están en la denuncia”, acotó.
Al llegar, la mujer pudo hablar con su familia sobre lo que había vivido y al día siguiente se comunicó con la diputada provincial electa Emilia Maciel, representante jurídica de La Libertad Avanza en Formosa, que fue quien la habría convocado a sumarse al partido.
Su respuesta la sorprendió: “pensá que puede ser diputado nacional”, audio que también fue presentado a la Justicia. Naser continuó contando que Maciel le habría dicho que arme un mensaje y lo envíe al grupo de whatsapp de fiscales, contando lo que había ocurrido.
“No se hizo responsable, no me llamó ni hizo una reunión conmigo para que pudiera explicar lo que estaba pasando. (Lo tomaron) como algo normal que pasa con el señor Gerardo. Esa fue la tercera vez que vi a este hombre, y las dos anteriores fueron reuniones de equipo, así que lo último que iba a pensar era que íbamos a parar en un lugar tan lejos y en una situación tan desagradable”, detalló.
Justamente, la decisión de hacer pública la denuncia fue por no haber tenido respuesta de su partido político ante la situación que planteó. De hecho, afirma estar bloqueada en los celulares de los referentes del partido y que eliminaron publicaciones relacionadas con ella. Además, sabiendo que el partido está incorporando fiscales para octubre, sintió la necesidad de dar a conocer lo que vivió.
En un principio, Naser presentó una denuncia que fue desestimada, algo que atribuyó a que tal vez la funcionaria policial no asentó de manera detallada lo vivido y cómo se sintió durante todo ese tiempo. “Quizás no hice hincapié en ciertos puntos”, comentó.
Una segunda denuncia sí fue tomada, aunque remarcó que las condiciones no fueron las adecuadas: si bien fue una policía mujer la que le tomó testimonio, “en el lugar había varios policías hombres”, lo que le generó incomodidad. Además, tras enviar un mail, la convocaron desde el Poder Judicial para una reunión en la que recibió atención de una psicóloga, una asistente social y una abogada, quienes le brindaron asesoramiento, explicándole la diferencia entre abuso y acoso.
“Me explicaron por qué mi primera denuncia había sido desestimada. Yo tenía que contar en detalle el manoseo, y asegurarme de que la policía que me tome la denuncia debe escribir lo que estaba explicando: no es ‘me tocó la pierna’ o ‘me tocó el cuello’, sino cómo lo hizo”, contó.
“Llegó un momento que me preguntaba si yo generé esta situación que estoy viviendo, porque hay falacias sobre mí, por las fotos que subo o mi forma de ser. Pero nada de eso da derecho (al acoso). No, es no”, concluyó.