"Los hijos de Ramón Ocampo ‘Agüita’ denuncian encubrimiento policial y acusan de narco a Armando Cabrera"
En Ibarreta se intensifica el reclamo por verdad y justicia tras la muerte de Ramón Ocampo, conocido como "Agüita", contratista de la construcción que trabajaba para Armando Felipe Cabrera. Sus hijos difundieron un nuevo y estremecedor video donde no solo desmienten la versión oficial de "suicidio", sino que exhiben pruebas gráficas de lo que consideran un encubrimiento policial y político.

La foto que contradice la versión oficial
En el video se ve la fotografía tomada por los propios hijos al momento de hallar el cuerpo. En la imagen original se observa pasto y manchas de sangre en el lugar. Sin embargo, denuncian que al día siguiente —cuando regresaron al sitio— el pasto había sido removido y las manchas de sangre desaparecieron. "Borraron toda evidencia para encubrir a los verdaderos responsables", aseguran.
Desmienten el "operativo policial"
Los hijos relatan que la policía jamás realizó un operativo cerrojo ni un rastrillaje real. "Nosotros mismos salimos a buscarlo y lo encontramos en cinco minutos. ¿Cómo es posible que la policía no lo haya encontrado con todo el supuesto despliegue que dicen haber hecho?", cuestionan. Además, denuncian que mientras ellos buscaban a su padre, la policía solo custodiaba su domicilio, intentando impedir que salieran a rastrearlo.
Señalamientos directos a Armando Cabrera
En su denuncia pública, los hijos acusan abiertamente a Armando "Papacito" Cabrera, hombre fuerte del poder local, de deberle millonarias sumas a su padre por obras realizadas. Afirman que "a Ramón Ocampo lo mandaron a matar para no pagarle" y lo señalan como "narco", responsabilizándolo no solo por las deudas sino también por las maniobras para encubrir el crimen.
Lesiones incompatibles con un suicidio
Los denunciantes también exhiben los daños que presentaba el cuerpo y el auto: disparos en la puerta del conductor, moretones en los brazos y lesiones múltiples incompatibles con la hipótesis de un suicidio. "Mi papá no pudo haberse golpeado con ningún ladrillo; en el lugar no había ladrillos ni construcciones. Lo tiraron como a un perro", afirman.
"Cumpliremos con el secreto de sumario, pero no con el silencio"
La familia asegura tener pruebas legales —autopsia e informe estadístico de defunción— que contradicen la carátula oficial. "Queremos que Ibarreta sea libre y sin miedo. Basta de silencio. Exigimos la verdad por Ramón Ocampo", remarcan. También instan a los vecinos y testigos a aportar datos: "Es el momento de hablar".
Un caso que conmociona a Ibarreta
Con fotografías, videos y denuncias públicas, los hijos de Ramón Ocampo han colocado en el centro del debate provincial un caso que para muchos resume la impunidad, el miedo y las redes de poder en Formosa. "Que la memoria de Ramón Ocampo sea la fuerza que mueva la verdad", concluyen.